Rodrigo Palominos Castro (Concepción, Chile 1979). Poeta. Escritor. Bioquímico [Universidad de Concepción (Chile)]
Ganador del Premio Municipal "Juegos Literarios Gabriela Mistral"
2012, de la I. Municipalidad de Santiago. Beca de Creación Literaria, 2013
& 2015. Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Mención honrosa en el
concurso nacional de poesía "Stella Corvalán", 2014. Primera mención honrosa en el VI concurso
nacional de poesía "Eduardo Anguita", 2010. Primera mención honrosa
en el VII concurso nacional de poesía "Dolores Pincheira", 2010.
Tercer lugar en el concurso nacional de poesía "Pedro Lastra", 2010.
Mención honrosa en el concurso nacional de poesía "Carlos Pezoa
Véliz" 2005, organizado por la Fundación Nueva Poesía. Sus poemarios
inéditos: Una nevera vacía en el jardín
(2010); Paisaje Cero (2014). Poemas aislados aparecen en
antologías: Selección de Poesía 2005,
editada por Fundación Nueva Poesía (2005). PlexoSur:
Poesía y Gráfica de Concepción, Valdivia, Temuco y Valparaíso. Editorial
Segismundo (2015).
Selección por Gladys Mendía de Paisaje Cero (inédito)
LA TORMENTA DE LA PALABRA
I
El aleteo de una mariposa
afuera en el jardín
impulsa una ventisca
en el monte Fujiyama
II
Esta palabra impulsa una tormenta en el principio
del mundo
Ahora, aquí retengo la palabra, esta cuerda
vibrante
la memoria
que cruza el río
que refleja la
sombra
que vuelve a mi
cuerpo
La palabra que es ahora
que cruza la puerta
donde al fondo refulge
verde esmeralda
lo que no soy
III
Elevo la mirada
hacia la muerte:
un árbol seco en el jardín
una
hoja seca en el campo de escarcha
Las palabras se heredan en el cuerpo, y a
través de los cuerpos
recorren
el tiempo de los hombres
EL AVE DE LA HIERBA
I
Aquí, el blanco vacío.
Frente a mis ojos en la arena del poema.
En la tensión simétrica
En la secuencia de palabras sin imágenes.
En el apagón fulgurante de la nube de
sonidos:
El ocaso enciende la linterna del rosal del
jardín
El vacío del cielo se refleja en las hojas
caídas
II
De esta quietud a la otra
la secuencia de palabras
De esta quietud a la otra
el único curso del río
De esta quietud a la otra
el único vuelo
para el vaho
de nuestra voz:
El ave de la hierba, sin embargo, en su
vuelo circular
confrontando a cada instante a la dorada
luz
MISSISSIPPI
JOHN HURT
Después
de haber
subido
el silencio
al mástil de la tarde
Mississippi john hurt
resuena
en la esquina
de
la pieza.
El verano afuera:
Brillan las cuerdas de plata de las raíces
del álamo.
Después
de haber
subido
el silencio
al mástil de la tarde
Mississippi john hurt
resuena
en el viento
en las piedras del camino
en la hierba seca
en este
blanco
espacio.
Afuera, es el comienzo del verano:
Me asombro,
Nada puedo añadir:
lo que diga
encubrirá el rumor del sol sobre la tierra,
el canto de la cigarra, el leve vaivén de
las hojas del álamo:
Entre
tanto
Mississippi
john hurt
resuena
en el mástil de la tarde:
sólo escucho: La puerta del mundo se abre
VISITA A LA TIERRA
Entre el musgo
y el aire
la cinta
de frío.
:
El sonido
fósil
del hombre.
La sal)
Tocó
la tecla del piano
que viaja aguas adentro.
(espuma
Un haz de sal que brilla en el límite de la
cala.
cuarzo, arena, greda y cal)
Greda y cal
en la lámina de sol.
Cuarzo y arena
De la que emerge
el virus del verde.
:
la sombra
de la nube
leve
en la teja roja.
UN TRANVÍA AVERIADO EN EL SUEÑO DE LA
LANGOSTA
Aquí la mente es
bulbo de lirios suelo azul
canto a la materia
canto a la luz
Aquí la mente es
esfera de acero suelo gris
canto
a la línea
que alcanza a la muerte
Un río de sonidos
imaginarios:
Aparece, en el camino, la hierba verde
brillante
La voz de un gángster en medio del desierto
Una lámpara de cartas
Una carta microscópica leída por mosquitos
amarillos
Nenúfares en flor en el agua verdosa del
gran río
Un tranvía averiado en el sueño de la
langosta
Laura Dern muere en la ciudad de los
Ángeles
Desechos de la aspiradora & la materia
del día
Eliminar el historial del verano
Pero avanza en esta corriente más allá:
Donde resuena la forma del silencio
Donde el corazón no se aleje
del anhelo doloroso
de alcanzar
el agua infinita
el enjambre radiante
Donde la alta montaña pierde su ceguera
Buen poeta Rodrigo,es de esos poetas piolas que escriben bien y no se andan mostrando,
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